“Se nota que me quiere en la mirada”

 

william-stitt-138564

Fotografía: William Stitt

Texto: Susana Aragón Fernández

Después del verano volvíamos a reunirnos con los niños y las niñas del grupo de tiempo libre. Unos jugaban en el suelo, ensimismados con unas piezas de madera y otros hacíamos unas manualidades en la mesa aprovechando unos rulos de cartón. Entre pintar, recortar, inventar y pegar surgían conversaciones espontáneas. En un momento dado una niña reconocía lo mucho que le quería su madre. Se me ocurrió preguntarle “¿Y eso cómo lo sabes, en qué notas que te quiere?, y, dirigiéndome a los demás… ¿en qué se nota cuando alguien te quiere?”. Otra niña, mirándome primero pensativa y enseguida con complicidad, respondió alegre y sin ninguna duda: “En la mirada”.

Los niños descubren que alguien les quiere “en la mirada”. Esta respuesta es de una gran sabiduría, una sabiduría que no tiene que ver con conceptos ni procedimientos aprendidos. Es la respuesta de quien sabe vivir lo esencial. Nadie dijo “me compra…”, “me lleva al centro comercial…”… O sea, sé que me quiere por cómo me mira.

Los adultos nos volvemos locos pensando en regalos, sorpresas, detalles, planes especiales… para demostrar que queremos a alguien. Y vamos por la vida a toda prisa, creándonos obligaciones, estrés… que nos quitan la paz. Nos hemos olvidado que el amor se transmite con “la mirada”. Y para mirar con cariño hace falta calma, detenimiento, mirar y descubrir la alegría o la tristeza del otro, dar valor a lo importante de la vida, que, por cierto, los niños bien lo saben desde muy pequeños.

Organizas una gran fiesta de cumpleaños, con un buen número de amigos, alquilando un amplio local, con su zona de toboganes y pelotas para que puedan jugar, piensas en un buen regalo, ahorras para ir a un parque temático al que tus amigos han llevado a sus hijos… Pues bien, si después de todo, el viaje, el parque de atracciones, los globos, la feria, el payaso, los regalos, la fiesta de cumpleaños, la piñata, la ropa bonita, la habitación bien decorada… si después de todo tu hijo o tu hija recibe de ti miradas frías, miradas cansadas o miradas que esconden desprecio o una ironía que no entienden o simplemente no llegan a tener tu mirada porque estás a otras cosas… nada de lo que has hecho ha servido. Te has cansado, has gastado tu dinero, te has perdido en ese ajetreo de estar pendiente de todos (otros niños, sus padres y madres, miles de whatsapps), te has llenado de nerviosismo… para finalmente no tener ni tiempo ni paz para lo más importante: dar una mirada de cariño a tu hijo o a tu hija.

Nahiara lo sabe muy bien “se nota que alguien me quiere en la mirada”.

Escrito en octubre de 2016 y publicado en la prensa en papel y digital

http://www.noticiasdenavarra.com/2016/10/29/opinion/cartas-al-director/se-nota-que-me-quiere-en-la-mirada

london-scout-41029Fotografía: London Scout

 

Si te ha gustado lo que has visto o leído en esta entrada, si te ha animado a reflexionar sobre algo, si te ha recordado algo de tu vida, si te ha provocado una emoción… o simplemente te ha entretenido, puedes darle a «me gusta» o puedes escribir un comentario que hace mucha ilusión recibir. También puedes invitar a tus amigos, a tus amigas, a tus familiares… a seguir este blog si crees que les puede gustar. ¡Muchas gracias por estar ahí!

Un comentario

  1. Esto es un comentario de prueba: pero qué cierto es todo eso que escribes! hay que relajar más el entrecejo que ayuda a poder mirar con amor a nuestros hijos.

    Me gusta

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s